DECLARACION DEL PARTIDO SOCIALISMO Y LIBERTAD ANTE LA CRISIS EN VENEZUELA
El paÃs atraviesa por una grave crisis polÃtica, como consecuencia del estrecho margen por el cual Nicolás Maduro, candidato del Psuv y el Polo Patriótico, se impuso al candidato de la MUD, Henrique Capriles Radonski. En las elecciones celebradas el pasado 14 abril, según las cifras oficiales, Maduro obtuvo 7.575.506 votos contra 7.302.641 votos obtenidos por Capriles, ganando la presidencia por una diferencia de tan sólo 272.865 votos.
En ese marco, el candidato de la MUD y sus partidarios han exigido extender la auditorÃa del 54% al 100% de los comprobantes de voto impresos. A sabiendas de que la MUD y su candidato no son ejemplo de democracia, y que en el pasado reciente estuvieron involucrados en un golpe y en el paro-sabotaje petrolero, consideramos que es necesario diferenciar entre lo que representa la dirección proimperialista de la MUD, y la exigencia legÃtima de millones de personas que reclaman la auditorÃa de todos los votos, lo cual se constituye en un derecho democrático. El propio Maduro inicialmente estuvo a favor de la auditorÃa del 100%, tal y como lo expresó en el discurso pronunciado la noche del 14 de abril con motivo de su triunfo electoral, pero al dÃa siguiente se produjo un recambio y se impuso el ala dura militar del gobierno encabezada por Diosdado Cabello, con la posición de no ampliar la auditorÃa.
Ya conocemos las arbitrariedades y utilización abusiva de los recursos del Estado por parte del gobierno en estas y otras elecciones. Son los mismos procedimientos que la burocracia sindical del gobierno utiliza en los sindicatos y en las organizaciones comunitarias para violar su autonomÃa; para oponerse a realizar elecciones democráticas y por la base; para imponer desde las gerencias de las empresas del Estado los consejos de trabajadores o para criminalizar la protesta. El ventajismo y las irregularidades propiciadas por el gobierno legitiman el reclamo de ampliar la auditorÃa, si bien hasta los momentos la MUD no ha presentado alegatos firmes para sustentar la tesis del fraude.
El gobierno ha utilizado esta exigencia legÃtima para plantear que estarÃa en marcha un plan golpista por parte de la dirigencia proimperialista de la MUD. Nuestro partido considera que hasta los momentos no hay evidencias de que haya un golpe en desarrollo. El gobierno miente nuevamente utilizando el fantasma de un supuesto golpe para unificar a sus partidarios y justificar restricciones a las libertades democráticas como la prohibición de marchar aplicada a una convocatoria realizada por la MUD para el 17 de abril en Caracas. Los que pueden dar golpes son los militares y estos y el Estado Mayor, se han pronunciado pública y abiertamente en respaldo al gobierno, no hay por los momentos llamados a paros patronales, ni actos de insubordinación, tampoco hay llamados públicos a los militares a insubordinarse, tal y como vivimos en el marco del golpe fascista y el paro petrolero de 2002. Pero debemos dejar en claro que de presentarse esa eventualidad en el futuro, nuestro partido lo enfrentarÃa de la misma manera en que lo hicimos en el 2002.
Somos enfáticos en condenar a los responsables de la violencia que ha cobrado la vida de 7 personas y dejado a 60 heridos, producto de ataques perpetrados por grupos con rasgos fascistas. Repudiamos enérgicamente los actos de violencia ejecutados tanto por partidarios de Capriles y la MUD contra sedes de Pdval, Mercal, CDI y otros servicios públicos, afectando con ello a los trabajadores y al pueblo. Asà como también rechazamos las acciones de violencia llevadas a cabo por motorizados militantes del Psuv y partidarios del gobierno, cuyas acciones se asemejan a las de los cabilleros adecos de otros tiempos. Hacemos un enérgico llamado al pueblo a cerrar filas en contra de las expresiones de violencia fascista de quienes pretenden pescar en rÃo revuelto
Para nosotros es fundamental comprender el significado de la caÃda abrupta de la votación del candidato del gobierno, hecho que ha producido la crisis polÃtica que atravesamos. Sin lugar a dudas que esto es consecuencia del rechazo y cansancio de un sector importante de la población ante los innumerables problemas que se han acumulado a lo largo de los últimos años, incluso en sectores populares en los que el chavismo tradicionalmente tuvo una amplia mayorÃa.
El descalabro electoral del Psuv y de Nicolás Maduro es continuidad del declive que el gobierno vive desde hace varios años. El descontento se aceleró en los últimos meses a consecuencia directa de la devaluación del 46,5% instrumentada por este gobierno el pasado mes de marzo que de un plumazo redujo el salario real de los trabajadores. Es expresión del cansancio de la población ante los continuos apagones, ante los bajos salarios, ante el deterioro de los servicios públicos y programas sociales, incluidas las Misiones, el empleo precario, la no discusión de los contratos colectivos, la criminalización de la protesta. Estas son las verdaderas causas de la crisis polÃtica que hoy se abre en el paÃs.
Ante esta situación, llamamos al pueblo a no brindar ninguna confianza a las dirigencias polÃticas de la MUD y el Psuv, que nos quieren utilizar como carne de cañón en un sordo conflicto que nada tiene que ver con nuestros intereses.
En ese sentido, debemos imponer una agenda de lucha por aumento de salarios y por todos los derechos de los trabajadores y el pueblo. Debemos seguir el ejemplo de los universitarios que marcharon unidos el pasado 4 de abril, profesores, empleados y obreros, chavistas y no chavistas e independientes, exigiendo aumento salarial y demás reivindicaciones laborales. Esta marcha fue resultado de un proceso de unidad de acción que se viene produciendo entre el Fadess y la Unete, proceso que hay que potenciar en función de lograr un 1 de mayo unitario, clasista, autónomo y combativo, en el que los trabajadores como clase social podamos dirigirnos al paÃs para presentar nuestra propuesta, que no es otra, que un verdadero gobierno de los trabajadores y el pueblo.
Los recientes hechos polÃticos ponen en el tapete el desafÃo de construir una opción polÃtica realmente revolucionaria y socialista, desde abajo. En la campaña electoral de octubre y en la de abril dijimos que ninguno de los dos candidatos mayoritarios resolverÃa los problemas de los trabajadores y el pueblo, de allà la importancia de construir una alternativa socialista y revolucionaria, que se convierta en herramienta de lucha para los trabajadores y el pueblo.
Por el Comité Ejecutivo
Orlando Chirino, Miguel Angel Hernández, José Bodas, Armando Guerra, Simón RodrÃguez Porras